Un año más ya hemos llegado a las fechas más especiales del año, donde las familias se reúnen, los problemas se aparcan a un lado y el mundo parece un poquito más feliz, aunque que sea por unos días.

Es por eso que desde el grupo ALGOS os queremos felicitar las navidades y desearos unas buenas fiestas, así como desearos a todos que el año que viene sea un año con menos dolor y… ¡más alegría y amor!, que de eso nunca hay suficiente.

El tema que nos gustaría tratar esta semana es cómo afecta (o puede afectar) el dolor crónico que sufren los padres, en el desarrollo de conductas de dolor en sus hijos.

Muchos son los hogares en los que alguno de los padres está afectado por algún tipo de dolor crónico (migrañas, lumbalgias, etc.).